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La construcción, a pesar de la actual crisis, es uno de los sectores más importantes de la economía. Vivas donde vivas, a tu alrededor siempre hay alguna obra en marcha. Arquitectura es una de las carreras claves para trabajar en este sector.
Aptitudes
Es imprescindible tener un buen sentido analítico y que se te den bien las matemáticas y la física, pues en estas materias se basa toda la arquitectura. Además, la capacidad creativa y el trabajo en equipo, son igualmente importantes, pues son cualidades que necesitarás para ejercer la profesión. Si te gusta más combinar el aspecto artístico de la arquitectura con la parte técnica, te conviene estudiar Arquitectura. Si por el contrario, lo que te llama la atención es trabajar especialmente en aspectos más prácticos, probablemente lo más apropiado es estudiar Ingeniería de Edificación.
Para sacar los estudios adelante es necesario dedicar muchas horas de trabajo, pues tendrás que hacer muchos proyectos que contarán tanto o más que los exámenes. Además, hay que leer muchos libros y revistas especializadas.
Muy recomendable
Además de manejarte lo mejor posible con programas de diseño gráfico con los que te familiarizarás durante la carrera, conviene conseguir prácticas en un estudio o en una obra antes de finalizar tus estudios. Dominar el inglés y el alemán supondrá una ventaja en el futuro laboral, ya que a nivel mundial estos dos idiomas junto con el castellano son los que imperan en el sector. De hecho, la mayoría de las revistas especializadas en arquitectura están escritas en alguna de estas tres lenguas.
En los estudios de Arquitectura se aprende no sólo a buscar la estética de un edificio. También a encontrar la forma de hacer instalaciones funcionales y seguras, a diferenciar la utilidad de los materiales de construcción, el cálculo de estructuras, paisajismo, etc. Además, en los últimos años está cobrando cada vez más importancia la formación adecuada para el cuidado del medio ambiente. Por ejemplo, hay que saber adaptar una construcción a un paisaje concreto para no destrozar la armonía del lugar o provocar graves daños a la naturaleza. Y para proyectar una idea también se aprende a manejar programas de ordenador de diseño gráfico.
Aunque la mayor parte de las construcciones en las que trabajan los arquitectos se refieren a edificios de viviendas o casas, otros proyectos en los que pueden desarrollar su labor son oficinas, centros comerciales, parques o plazas… La salida laboral más habitual para un Arquitecto es el trabajo en un estudio de arquitectura como socio o como empleado. Además de los estudios de arquitectura, los arquitectos suelen ocupar un puesto en las promotoras. Otras opciones menos habituales son un puesto de funcionario en la Administración o ejercer de peritos judiciales evaluando el estado de las edificaciones o posibles daños en alguna construcción. También se puede trabajar en cualquier empresa relacionada con el diseño, arte, urbanismo, construcción, restauración y rehabilitación o temas ambientales.
Las principales funciones de un arquitecto son las de proyectar nuevos edificios o rehabilitar alguno ya construido. ¿Qué implica “proyectar”? Como nos aclara el arquitecto madrileño Daniel Halbach, “el arquitecto diseña y calcula las estructuras, define los volúmenes de los espacios y dedica también su tiempo a detalles como la textura y el color. La proyección siempre conlleva un aspecto manual, ya que para toda propuesta es necesario presentar una maqueta que tú mismo debes crear”. El proyecto tiene una función doble. Por un lado, es el manual para construir la casa, pero por otro lado es el contrato que firman el constructor, que es el que paga, y el promotor, que es el que se queda con la casa. El arquitecto debe gestionar la construcción y supervisar la obra, de la cual él es el máximo responsable.
Salario
Según un informe del Colegio de Arquitectos, los arquitectos suelen ganar menos de 1.500€ mensuales en sus primeros años de profesión, en los que habitualmente están contratados en un estudio de arquitectos o en una promotora. La mayoría de los arquitectos acostumbran a trabajar de forma independiente o asociados con otros dos a cuatro profesionales. En este caso, después de años de experiencia la retribución asciende a una media de unos 3.400 € al mes. Son los mejores sueldos del gremio, pero también de los que más trabajan.